Ofatumumab: Una guía completa para pacientes con esclerosis múltiple remitente-recurrente.

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Ofatumumab (Kesimpta®) es un tratamiento mensual autoadministrado innovador para la esclerosis múltiple remitente-recurrente que supera significativamente al tratamiento oral con teriflunomida. En dos ensayos clínicos importantes con 1.882 pacientes, ofatumumab redujo las tasas anuales de recaída en más del 50%, disminuyó las lesiones cerebrales detectadas por resonancia magnética entre un 82% y un 94%, y redujo el riesgo de progresión de la discapacidad entre un 32% y un 34%. Aunque el tratamiento puede causar reacciones relacionadas con la inyección e infecciones, estos efectos secundarios fueron generalmente manejables, lo que convierte a ofatumumab en una opción eficaz y conveniente para los pacientes que buscan controlar su esclerosis múltiple con terapia domiciliaria.

Ofatumumab: Guía exhaustiva para pacientes con esclerosis múltiple remitente-recurrente

Tabla de contenidos

Introducción: Comprender la esclerosis múltiple y las opciones de tratamiento

La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad neurológica crónica que afecta aproximadamente a 2,8 millones de personas en todo el mundo, siendo las mujeres hasta tres veces más propensas a desarrollarla que los hombres. Aunque actualmente no existe cura para la EM, los tratamientos modificadores de la enfermedad pueden reducir significativamente las recaídas (exacerbaciones de síntomas) y enlentecer la progresión de la discapacidad.

Para pacientes con formas remitentes de EM—incluyendo el síndrome clínicamente aislado, la EM remitente-recurrente y la EM secundaria progresiva con actividad—la prevención de recaídas es crucial. Investigaciones han demostrado que los linfocitos B, un tipo de célula inmunitaria, desempeñan un papel clave en la inflamación y el daño de la EM. El ofatumumab (comercializado como Kesimpta®) representa un nuevo enfoque terapéutico como primera terapia dirigida a linfocitos B que los pacientes pueden autoadministrarse en domicilio tras formación adecuada.

Este artículo ofrece una visión exhaustiva del ofatumumab basada en amplia investigación clínica, incluyendo dos importantes ensayos de fase III denominados ASCLEPIOS I y II que compararon este medicamento con teriflunomida, un tratamiento oral establecido para la EM. Comprender su mecanismo de acción, beneficios y posibles efectos adversos puede ayudar a los pacientes a tomar decisiones informadas sobre sus opciones terapéuticas.

Mecanismo de acción del ofatumumab en el organismo

El ofatumumab es un anticuerpo monoclonal completamente humano que se dirige específicamente al CD20, una proteína presente en la superficie de los linfocitos B. Al unirse a esta proteína, el ofatumumab agota eficazmente estas células inmunitarias mediante dos mecanismos principales: citotoxicidad mediada por complemento (activando el sistema inmunitario para destruir las células) y citotoxicidad celular dependiente de anticuerpos (reclutando otras células inmunitarias para eliminar los linfocitos B).

El medicamento demuestra una acción rápida y sostenida contra los linfocitos B. Los ensayos clínicos mostraron que:

  • El 84,6% de los pacientes presentó recuentos de linfocitos B inferiores a 10 células/μL al día 14 del tratamiento
  • El 94% de los pacientes mantuvo recuentos de linfocitos B inferiores a 10 células/μL en la semana 4
  • Este agotamiento profundo de linfocitos B se mantuvo hasta 120 semanas (más de 2 años) con tratamiento mensual continuado

A diferencia de otras terapias dirigidas a linfocitos B, el ofatumumab permite una recuperación relativamente rápida tras la interrupción del tratamiento. El tiempo mediano para que los linfocitos B regresen a niveles normales tras suspender el ofatumumab fue de 24,6 semanas (aproximadamente 6 meses), según datos de ensayos clínicos.

Los investigadores también midieron la cadena ligera de neurofilamentos (NfL por sus siglas en inglés), un biomarcador que indica daño nervioso en la EM. Los pacientes que recibieron ofatumumab mostraron reducciones significativas en los niveles de NfL—de una media de 13,3 pg/mL al inicio a 6,8-6,9 pg/mL tras 24 meses de tratamiento—en comparación con aquellos que tomaron teriflunomida (9,0 pg/mL). Esta reducción sugiere que el ofatumumab reduce eficazmente el daño nervioso asociado con la progresión de la EM.

Resultados de los ensayos clínicos: Eficacia del ofatumumab

La aprobación del ofatumumab se basó en dos ensayos clínicos de fase III idénticos (ASCLEPIOS I y II) que incluyeron conjuntamente a 1.882 adultos de 18-55 años con formas remitentes de EM. Estos fueron estudios rigurosos diseñados para comparar inyecciones subcutáneas mensuales de ofatumumab con comprimidos orales diarios de teriflunomida.

Las características de los pacientes en ambos ensayos estaban bien equilibradas: edad media de 38 años, 68% mujeres, 89% caucásicos, 94% con EM remitente-recurrente y 40% sin tratamiento modificador de la enfermedad previo. La puntuación media en la Escala Expandida del Estado de Discapacidad (EDSS por sus siglas en inglés) fue de 2,9 al inicio, indicando discapacidad leve a moderada.

Reducción de recaídas
La medida principal de eficacia fue la tasa anualizada de recaídas (número de recaídas por paciente y año). El ofatumumab demostró eficacia superior:

  • ASCLEPIOS I: 0,11 recaídas/año con ofatumumab vs. 0,22 con teriflunomida (reducción del 51%)
  • ASCLEPIOS II: 0,10 recaídas/año con ofatumumab vs. 0,25 con teriflunomida (reducción del 58%)

Estos resultados fueron estadísticamente muy significativos (p<0,001), meaning there's less than a 0,1% chance they occurred by random chance.

Actividad de lesiones en resonancia magnética
El ofatumumab redujo drásticamente la evidencia de actividad de la enfermedad en las resonancias magnéticas:

  • Lesiones T1 realzadas con gadolinio (que indican inflamación activa): reducción del 97% en ASCLEPIOS I y del 94% en ASCLEPIOS II comparado con teriflunomida
  • Lesiones T2 nuevas o en aumento (que indican carga de enfermedad): reducción del 82% en ASCLEPIOS I y del 85% en ASCLEPIOS II comparado con teriflunomida

Progresión de la discapacidad
El ofatumumab enlenteció significativamente el empeoramiento de la discapacidad comparado con teriflunomida:

  • Reducción del 34% en el riesgo de progresión de discapacidad confirmada a 3 meses (10,9% vs. 15,0% de pacientes)
  • Reducción del 32% en el riesgo de progresión de discapacidad confirmada a 6 meses (8,1% vs. 12,0% de pacientes)

Estos beneficios en discapacidad fueron estadísticamente significativos (p=0,002 para progresión a 3 meses y p=0,01 para progresión a 6 meses). El estudio no encontró diferencias significativas entre tratamientos en cuanto a mejoría de la discapacidad o pérdida de volumen cerebral.

Beneficios en pacientes recién diagnosticados
Un análisis separado se centró en 615 pacientes recién diagnosticados (dentro de los 3 años anteriores) y sin tratamientos previos para la EM. El ofatumumab mostró beneficios igualmente sólidos en este grupo, reduciendo las tasas de recaída y la progresión de discapacidad comparado con teriflunomida.

Efectos adversos y perfil de seguridad

El ofatumumab demostró un perfil de seguridad generalmente manejable en los ensayos clínicos. En los datos agrupados de ambos estudios de fase III:

  • El 83,6% de los pacientes con ofatumumab experimentaron eventos adversos frente al 84,2% con teriflunomida
  • El 9,1% de los pacientes con ofatumumab experimentaron eventos adversos graves frente al 7,9% con teriflunomida
  • El 5,7% de los pacientes con ofatumumab suspendieron el tratamiento por efectos adversos frente al 5,2% con teriflunomida

Los efectos adversos más frecuentes que ocurrieron en al menos el 10% de los pacientes que recibieron ofatumumab incluyeron:

  • Reacciones relacionadas con la inyección (20,6%)
  • Nasofaringitis (síntomas de resfriado común) (18%)
  • Cefalea (13,3%)
  • Reacciones en el lugar de inyección (10,9%)
  • Infecciones del tracto respiratorio superior (10,3%)
  • Infecciones del tracto urinario (10,3%)

La mayoría de las reacciones en el lugar de inyección fueron leves a moderadas e incluyeron eritema, dolor, prurito e hinchazón. El uso de medicamentos preventivos como analgésicos, antihistamínicos o esteroides no redujo significativamente la frecuencia de estas reacciones.

Consideraciones especiales de seguridad

Los investigadores prestaron especial atención a varios posibles problemas de seguridad con el tratamiento con ofatumumab:

Infecciones
Las infecciones ocurrieron con frecuencias similares entre grupos de tratamiento (51,6% con ofatumumab vs. 52,7% con teriflunomida). Las infecciones graves fueron ligeramente más frecuentes con ofatumumab (2,5% vs. 1,8%), leading to temporary treatment interruption in 1,2% of patients and discontinuation in 0,2%.

Niveles de inmunoglobulinas
El tratamiento con ofatumumab redujo los niveles de inmunoglobulina M (IgM) en un 30,9% tras 48 semanas y en un 38,8% tras 96 semanas. Aproximadamente el 14,3% de los pacientes desarrollaron niveles de IgM por debajo del rango normal. Sin embargo, esta reducción no se asoció con un mayor riesgo de infecciones. Los niveles de inmunoglobulina G (IgG) aumentaron ligeramente (4,3% a las 48 semanas).

Datos a largo plazo del ensayo ALITHIOS (siguiendo pacientes hasta 3,5 años) mostraron que los cambios en los niveles de inmunoglobulinas no aumentaron el riesgo de infecciones graves, que ocurrieron a una tasa de 1,39 por 100 pacientes-año.

Reacciones relacionadas con la inyección
Las reacciones sistémicas relacionadas con la inyección (que afectan a todo el cuerpo en lugar de solo al lugar de inyección) ocurrieron con mayor frecuencia con ofatumumab que con las inyecciones de placebo administradas al grupo de teriflunomida. Estas reacciones fueron más frecuentes con la primera inyección (14,4% de pacientes) y disminuyeron a menos del 3% a partir de la tercera inyección. La mayoría fueron leves a moderadas e incluyeron:

  • Fiebre
  • Cefalea
  • Dolor muscular (mialgia)
  • Escalofríos
  • Fatiga

Solo dos pacientes (0,2%) experimentaron reacciones graves a la inyección, y solo un paciente suspendió el tratamiento tras la primera inyección por este efecto adverso.

Riesgo de malignidad
No se observó mayor riesgo de cáncer con ofatumumab comparado con teriflunomida (0,5% vs. 0,4% de pacientes).

Posología y administración

El ofatumumab está aprobado en Estados Unidos, Unión Europea, Japón y otros países para el tratamiento de formas remitentes de EM en adultos. El medicamento se presenta en un autoinyector precargado o jeringa precargada (Sensoready®) que contiene 20 mg/0,4 mL de medicamento para inyección subcutánea en abdomen, muslo o parte superior externa del brazo.

El esquema posológico recomendado es:

  1. Dosis inicial: 20 mg el día 1
  2. Segunda dosis: 20 mg el día 7
  3. Tercera dosis: 20 mg el día 14
  4. Dosis de mantenimiento: 20 mg una vez al mes a partir del día 28

La primera inyección debe administrarse bajo supervisión de un profesional sanitario que pueda proporcionar formación adecuada sobre la técnica de autoinyección. El ofatumumab está contraindicado en pacientes con infecciones activas graves, neoplasias malignas activas conocidas o aquellos inmunodeprimidos graves. En Estados Unidos, los pacientes con infección activa por virus de la hepatitis B no deben recibir ofatumumab.

Conclusión: ¿Es el ofatumumab adecuado para usted?

El ofatumumab representa un avance significativo en el tratamiento de la EM como primera terapia dirigida a linfocitos B que los pacientes pueden autoadministrarse en domicilio. Los datos de ensayos clínicos demuestran eficacia superior comparado con teriflunomida en la reducción de tasas de recaída, actividad de lesiones en resonancia magnética y progresión de discapacidad.

La conveniencia de la autoinyección mensual ofrece ventajas sobre tratamientos que requieren perfusión intravenosa en centros médicos. Aunque las reacciones relacionadas con la inyección y las infecciones son efectos adversos frecuentes, generalmente son manejables y disminuyen en frecuencia tras las dosis iniciales.

Como con cualquier tratamiento para la EM, la decisión de usar ofatumumab debe tomarse en consulta con su médico, considerando sus características específicas de enfermedad, historial terapéutico y preferencias personales. El medicamento puede ser particularmente adecuado para pacientes que buscan un control efectivo de la enfermedad con la conveniencia de la administración domiciliaria.

Fuentes de información

Artículo original: Ofatumumab: una revisión en las formas recurrentes de esclerosis múltiple
Autores: Connie Kang, Hannah A. Blair
Publicación: Drugs (2022) 82:55–62
Nota: Este artículo dirigido a pacientes se basa en una investigación revisada por pares publicada originalmente en una revista científica. Conserva todos los hallazgos clave, datos y conclusiones de la investigación original, trasladando la información a un lenguaje más accesible para los pacientes.